ISSN: 1579-0223
 
Sentience Research
REDcientífica
· Misión de REDcientífica
· Contacto
· Condiciones de publicación
· Consultar todos los documentos
· Consultar todos los autores
· Acceso usuarios registrados
· English version


PORTADAS
40  41  42  43  44  45  46  47  48  49  50  51  52  53 

BOLETINES
40  41  42  43  44  45  46  47  48  49  50  51  52  53 

TEMAS



ENLACES

El ser y la vida. La Psicología como estudio objetivo de la conciencia

Alejandro Alvarez Silva
 
ImprimirEnviar



1. La Psicología como estudio objetivo de la conciencia

Partiendo del planteamiento de que no merecía la pena estudiar la conciencia "directamente", creyendo que podría obtenerse la solución a varios problemas limitando la investigación en dirección al estudio del comportamiento, fue desarrollada en Rusia la psicología de la conducta (Sechenov, Bechterev, Weiss, Holt, etc.)

Los principales representantes de la psicología de la conducta fueron los siguientes. En la corriente evolucionista Charles Darwin ("El origen de las especies"); en el funcionalismo norteamericano William James, Stanley Hall, James Mackeen Cattell y los grupos de Chicago y Columbia; en el posterior conductismo John B. Watson, Tolman, Hull y Lashley; en el análisis experimental de la conducta B. F. Skinner; en el análisis interconductual J. R. Kantor y por fin en el análisis de la conducta y el estudio de los procesos cognoscitivos y sociales Bandura y Staats.

Como hemos dicho, la psicología de la conducta pretende dar explicación al comportamiento observado (carácter "objetivo" de la psicología) aplicando métodos y principios de psicología animal a los humanos, rechazando frontalmente cualquier explicación mentalista: "lo que importa no es lo que piensa sino cómo ejecuta la acción."

Los presupuestos básicos de la corriente evolucionista son los siguientes:

  1. Las especies proceden de la paulatina transformación de otras especies precedentes.
  2. Las especies acaban diferenciándose entre sí por acumulación de caracteres diferentes.
  3. Los cambios continuos del ambiente hacen que sólo sobrevivan los individuos cuyas características permiten una mejor adaptación.

William James ("Pragmatismo", "A pluralista universa", "The meaning of truth") plantea que el objeto de la psicología debe encaminarse al estudio de los procesos eferentes, las consecuencias motoras y los procesos centrales que dan sentido a los otros dos. Define el instinto como la facultad de actuar de modo determinado con un fin determinado, no conocido en el momento de actuar, y sin preparación o educación previa al respecto.

Cattell desarrolló una aproximación práctica y objetiva hacia el estudio de los procesos mentales, al centrarse "no en los contenidos de la conciencia" sino en sus funciones estudiadas en términos de utilidad para el organismo. Construyó aparatos psicofísicos y propuso una ley de la raíz cuadrada como sustituto de la ley de Weber.

El grupo de psicología funcional de Chicago (Dewey, James R. Angell) hizo un gran avance en psicología animal y educacional.

La psicología del grupo de Columbia (Thorndike, Cattell y Woodworth) desarrolló las curvas de aprendizaje, que permitió enunciar el aprendizaje llamado de ensayo-error.

Como resumen, los presupuestos del funcionalismo serían:

  1. La psicología funcional es una psicología de las "operaciones" mentales en contraste con la psicología de los "elementos" mentales.
  2. La psicología funcional también es una psicología de las "utilidades mentales" de la conciencia sobre el medio ambiente y las necesidades del organismo.
  3. La psicología funcional contiene toda la psicofísica.

El conductismo se desarrolló a partir de J. B. Watson con su artículo "Psychology as the behaviorist view it". Su método consistió en combinar en un solo sistema el pragmatismo del funcionalismo, el método experimental de la psicología animal y el condicionamiento de Pavlov y Bechterev.

Watson ataca duramente la conciencia y la introspección. En su última obra importante, "El conductismo", da mucha importancia al ambiente, en detrimento de los factores hereditarios en la conducta humana. Llega a rechazar la ley del efecto planteada por Thorndike por el hecho de que al mencionar en la misma términos como placer o satisfacción, se estaban suponiendo estados emocionales percibidos subjetivamente lo que implicaba una introspección.

El neoconductismo (Tolman, Hull y Lasheley) es una especie de combinación entre el conductismo y la psicología de la Gestalt, la escuela con mayor insistencia en el conocimiento y la percepción. Según Tolman, no hay conducta si no hay respuesta, pero lo decisivo es que el organismo "aprenda a relacionar los estímulos entre sí más que los estímulos con las respuestas".

Hull introdujo la motivación como factor básico en el aprendizaje.

Las ideas conductistas se resumen en:

  1. La psicología es una parte de la ciencia cuyo objeto es la conducta humana. "La vida psíquica o la conciencia no hay por qué mencionarla."
  2. La conducta se compone de elementos de respuesta, que puede ser analizada por métodos "objetivos" de la ciencia.
  3. La conducta compuesta de secreciones glandulares y movimientos musculares es reductible a procesos fisicoquímicos.
  4. Como a todo estímulo le surge una respuesta, y toda respuesta se debe a un estímulo, en este sentido existe un "determinismo" de causa y efecto conductual.
  5. Los procesos mentales o de conciencia "si existen" no pueden estudiarse de forma científica.

Skinner ("The behavior of organisms") se preocupa más de describir lo que ve y en buscar las relaciones funcionales entre un fenómeno observado y sus antecedentes y consecuentes (condicionamiento operante).

Para L. Kantor los eventos psicológicos comprenden los "ajustes originales del organismo a los objetos ambientales" (empirismo inductivo).

Premack nos redefine el refuerzo no en términos de satisfacción ni de aprendizaje, sino en términos de frecuencias o probabilidad: las preferencias del sujeto permitirán por la ley de la probabilidad, determinar cómo responderá el organismo ante una clase de estímulos (es probable se responda mejor ante estímulos a los que las actividades cotidianas dedican más tiempo -las preferibles).

Para Bandura (teoría social cognitiva) las personas no son impulsadas por fuerzas internas, ni moldeadas o controladas por estímulos externos, sino que el "funcionamiento humano" se explica en términos de reciprocidad triádica: conducta, factores cognitivos (y otros personajes) y acontecimientos ambientales operan como determinantes unos de otros, interaccionando entre sí.

Dentro de la triádica se incluye las capacidades de simbolización, previsión -aprendizaje vicario por observación de modelos, autorregulación y autorreflexión (autoconciencia reflexiva). Es una vía intermedia entre el conductismo (estímulos ambientales) y el determinismo de los factores de personalidad, puesto que los anteriores interaccionan, viéndose afectados, a su vez, por la conducta misma, como tercer factor activo, y no como subproducto resultante de los otros dos. Y es que las influencias ambientales afectan a la conducta por medio de un proceso de simbolización.

Bandura diferencia los resultados externos de las acciones, de los resultados vicarios detectados en modelos y los resultados o consecuencias internas al sujeto (autocontrol y su propia eficacia).

El somero repaso anterior de la psicología "científica" de los hechos "externos u objetivos" del comportamiento, nos induce a una inmediata crítica del mismo hecho científico. Deliberadamente se estudia la realidad de forma "segada", si entre la realidad incluimos "la conciencia", puesto que la investigación sobre los aspectos externos de la conciencia (los "hechos" del comportamiento: acciones), dejando de lado los internos ( subjetividad), supone el abandono de una parte importante de la realidad total cual es la conciencia. De otro modo, es evidente la necesidad del "refinamiento" de esa ciencia, hacia mayores niveles, lo que permitirá un acercamiento a la verdadera realidad de dicha conciencia. Ahora bien, una medida elemental de prudencia, a la que no son ajenos los errores históricos anteriores, precisa que esta incursión en la "subjetividad" se realice en una única dirección: la que establece la flecha o dirección desde lo "objetivo a lo subjetivo"(y nunca al contrario). Las vías objetivas (ciencia) deben ser siempre prioritarias; deben agotarse todas sus posibilidades presentes antes de la inmersión en la vía subjetiva.

Para ser justos, si ha habido anteriormente una inmersión en la vía subjetiva en nuestra cultura occidental. Esa es al menos nuestra valoración del psicoanálisis de Freud, junto con sus nuevas escuelas.

La crítica anterior a la ciencia oficial u ortodoxa, será nuevamente reforzada por la aportación de las nuevas tendencia científicas más heterodoxas que analizaremos en el capítulo sobre los nuevos paradigmas.


Índice



Sobre el autor


Alejandro Álvarez ha trabajado como jefe de redacción y como articulista en diversas revistas y publicaciones. Es director de la revista digital "Foro Esencia" y es autor de diversos ensayos.





Otros documentos del mismo autor




© Copyright 2001-2004 Alejandro Alvarez Silva.
© Copyright 2001-2004 REDcientífica.
Todos los derechos reservados.


[Evaluar este artículo]








              Misión de REDcientífica              Condiciones de publicación              E-mail de contacto



  Bookmark and Share