Tal como ocurre con otros textos, la propuesta del presente no consiste en una revisión formal y completa del tema, ni en una actualización del mismo.
El presente, consiste en acercar a la comunidad científica, "un nuevo enfoque sobre viejos temas."
No escapa al autor, que quizá debiera entrecomillar la palabra nuevo, ya que en realidad las ideas volcadas en la obra registran sobrados antecedentes en su línea de pensamiento. Algunas de ellos, de notable factura, calificadas por propios méritos, y por el prestigio de los autores que las respaldan.
Obviamente, la influencia de tales ideas se apreciará no sólo en el texto, sino también en las citas bibliográficas.
Es preciso que el lector no espere encontrar en estas páginas, algún dato nuevo sobre la evolución y otros conceptos que se desarrollan en la obra.
Se trata de una obra en la que se plantean diferentes enfoques, significados e interpretaciones de conceptos generales de la biología.
No es necesario, por la tanto, citar en forma de "catarata", la más nueva y actualizada información. Cuando ello es preciso, se lo hace, pero tan solo a fin de comprender el tema. La mayor parte de las veces, no es necesario.
Conceptos generales, al alcance de un estudioso de la biología, son suficientes para comprender la propuesta. No se necesita ser un experto, par dar a la obra un correcta lectura.
Sin embargo, no se debe caer en el engaño de pensar que por ello resultará un texto de fácil interpretación para todo lector.
Una cuestión importante, es ¿por qué desarrollar en un texto de biología, el apartado referido al concepto de complementariedad, un concepto que procede de la física teórica?.
Pues simplemente, porque la complementariedad presta servicio a la hora de evaluar la definición de la vida, o para mejor decir, la indefinición intrínseca del fenómeno biológico.
En la presente, dicho tema confiere el marco teórico de referencia para el desarrollo global de la misma. El rol que se le asigna al concepto de complementariedad en el terreno de la biología, es una muestra de la creciente importancia que tiene para nosotros, los biólogos, incorporar conceptos de física para poder recrear conceptos y generar una nueva biología.
La obra recorre así, conceptos íntimamente vinculados a temas como la diferenciación, la división o la muerte de las células, desarrollados por el autor en otro texto. Tales circunstancias de la vida celular, afectan directamente la identidad de las células.
Ello sufre aquí una generalización conceptual, adquiriendo el grado de principios generales de la biología, más allá de las células o de cualquier ser vivo en particular.
Dentro ya de tales principios, se encuentra el de evolución. Y al analizar el mismo, surge la cuestión de los modelos de evolución.
Esto sirve, como se verá, para generar un particular modelo del proceso evolutivo, y a propósito de ello tomar distancia conceptual respecto de las clásicas teorías de la evolución con que se cuenta hasta el presente. Ello deviene así, no solo en un modelo, sino en una teoría que difiere en algunos puntos centrales con las demás de su género.
Pero si bien puede erigirse en el punto dominante de la obra, la misma no consiste tan solo en aportar una nueva teoría sobre la evolución.
El objetivo es hacer expresos los principios generales de la biología, esos principios que se cumplen en todo ser vivo. Y como parte de ellos, redefinir el concepto de evolución. En dicho marco, y bajo la "sombra" de la complementariedad como concepto omnipresente, es fácil comprender que se trata de temas íntimamente relacionados entre sí, conexos desde su misma esencia.
Sin embargo, los aludidos principios generales no son un descubrimiento del autor. Ello sería como reclamar para sí la autoría de la teoría de la evolución, o la teoría celular. Darwin, Wallace, Schwann, Virchow y muchos otros, nos regalaron ya ese legado.
Tan solo se pretende "soplar" algo de aire fresco, operar algunos cambios conceptuales y rescatar de las penumbras de lo "tácito", los principios mencionados. Ello puede contribuir a tenerlos más presentes, expresos, y conceptualmente más claros. Puede ayudar también, a relacionarlos mejor, y por qué no, a recrearlos desde un punto de vista distinto de los conocidos.
Continuación: Capítulo II. El marco teórico global.